viernes, 28 de septiembre de 2012

Semana del Prematuro - 1ra. Semana de Octubre de 2012

Más de 70 maternidades en todo el país celebrarán la Semana del Prematuro, un festejo que empieza el domingo 30 de Septiembre con un gran encuentro para Celebrar la Vida en el arco de Tecnópolis. A los largo de la semana se llevarán adelante diversas actividades con el objetivo de informar a la comunidad sobre los derechos de los bebés que nacen antes de tiempo y sus mamás.
Los esfuerzos para mejorar la atención perinatal han logrado disminuir la mortalidad de los recién nacidos prematuros, no obstante la mitad de los niños menores de un año que mueren en la Argentina son prematuros que pesan menos de 2.500 g al nacer, y la tercera parte pesa menos de 1.500 g, la mayoría de estos niños fallece en las primeras semanas de vida.

El objetivo de la campaña es movilizar a toda la sociedad, plantear y explicar la prematurez como un problema de salud pública, difundir los derechos que tienen los prematuros y sus familias, sobre todo el de permanecer acompañados durante la internación por sus padres, además de concientizar en medidas preventivas, como los controles del embarazo.

La Semana del Prematuro abarca 143 instituciones en todas las provincias del país, en las que se desarrollarán distintas actividades para agasajar a los bebés internados y sus familias, concretar espacios de reflexión en las Unidades de Terapia intensiva neonatal para el personal de salud de obstetricia, neonatología y pediatría, y difundir acciones de prevención durante el embarazo y en el cuidado de los recién nacidos prematuros.

La prematurez es la principal causa de ingreso a las unidades de cuidados intensivos neonatales y ejerce una marcada influencia sobre la mortalidad infantil.

Se trata de una condición biológica con prevalencia en aumento a nivel mundial cuyo origen es multifactorial (biológico, ambiental y social). Implica para la mayoría de las personas que nacen con esta condición largos períodos de recuperación y plazos de seguimiento muy extensos con necesidad de equipos humanos y servicios especializados que den respuesta a las distintas necesidades en las etapas de la vida que van atravesando.

La información contendida en este “decálogo” está orientada hacia la comunicación, la comprensión y el dominio del entorno social, material e ideal sobre algunos de los principales derechos que tienen los niños y adolescentes que nacen prematuramente.

Conocer sobre sus derechos nos ayuda a reflexionar sobre cómo es posible participar en el reclamo de su cumplimiento, desde donde a cada uno nos toca actuar como seres sociales.
  1. La prematurez se puede prevenir en muchos casos, por medio del control del embarazo al que tienen derecho todas las mujeres.
  2. Los recién nacidos prematuros tienen derecho a nacer y a ser atendidos en lugares adecuados.
  3. El recién nacido prematuro tiene derecho a recibir atención adecuada a sus necesidades, considerando sus semanas de gestación, su peso al nacer y sus características individuales. Cada paso en su tratamiento debe ser dado con visión de futuro.
  4. Los recién nacidos de parto prematuro tienen derecho a recibir cuidados de enfermería de alta calidad, orientados a proteger su desarrollo y centrados en la familia.
  5. Los bebés nacidos de parto prematuro tienen derecho a ser alimentados con leche materna.
  6. Todo prematuro tiene derecho a la prevención de la ceguera por retinopatía del prematuro (ROP).
  7. Un niño que fue recién nacido prematuro de alto riesgo debe acceder, luego del alta neonatal, a programas especiales de seguimiento.
  8. La familia de un recién nacido prematuro tiene pleno derecho a la información y a la participación en la toma de decisiones sobre su salud a lo largo de toda su atención neonatal y pediátrica.
  9. El recién nacido prematuro tiene derecho a ser acompañado por su familia todo el tiempo.
  10. Las personas que nacen de parto prematuro tienen el mismo derecho a la integración social que las que nacen a término.

Fuente: www.unicef.org.ar

lunes, 24 de septiembre de 2012

Día Mundial del Corazón - 29 de Septiembre

El Día Mundial del Corazón fue creado en el año 2000 para informar a la gente de todo el mundo que las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares son la principal causa mundial de muerte, alegando 17,3 millones de vidas cada año y las cifras van en aumento. Cabe destacar que al menos el 80% de las muertes prematuras por cardiopatía y ACV podrían evitarse si los principales factores de riesgo, el tabaco, la dieta poco saludable y inactividad física, son controlados.

Las enfermedades cardiovasculares se deben a trastornos del corazón y los vasos sanguíneos, entre ellos las cardiopatías coronarias (ataques cardíacos), las enfermedades cerebrovasculares (apoplejía), el aumento de la tensión arterial (hipertensión), las vasculopatías periféricas, las cardiopatías reumáticas, las cardiopatías congénitas y la insuficiencia cardiaca.

Un corazón sano es vital para vivir la vida al máximo, independientemente de la edad y el género. Al contrario de lo que se puede suponer, las mujer está expuesta a los mismos factores de riesgo que el hombre, pero con el agravante de que muchas veces se minimizan.

Los estilos de vida poco saludables que conducen a la enfermedad cardiovascular a menudo comienzan en la infancia y la adolescencia, por lo que la prevención de las enfermedades del corazón debe comenzar allí. Sí, los niños también son vulnerables a esas enfermedades. Por eso es importante incentivar en ellos hábitos saludables desde muy pequeños. Jugar con ellos al aire libre, pedir que ayuden en las tareas de la casa, brindarles alimentos saludables y restringir los no tan saludables y no fumar delante de ellos son algunas de las cosas que podemos hacer por su salud.



Promoviendo buenas prácticas, la Fundación Favaloro ofrece algunos consejos para cuidar el corazón:
  • Alimentate sanamente: comé al menos cinco porciones de fruta y verdura al día.
  • Aprendé a elegir: pedí el «menú sano» o llevate la comida de casa.
  • Realizá más actividad física: sólo 30 minutos de ejercicio diario pueden ayudar a su salud. Subí por las escaleras, realizá un paseo durante el descanso o bajate del colectivo dos paradas antes. La actividad física y la buena alimentación favorecen el bienestar personal, físico y sobre todo, psicológico. Se ha demostrado que el ejercicio mejora el humor y la motivación laboral.
  • Utilizá menos sal y evitá la comida preparada: intentá limitar el consumo diario de sal a una cucharadita.
  • Decí «no» al tabaco: el riesgo de enfermedad coronaria se reducirá a la mitad en un año y con el tiempo volverá a un nivel normal.
  • Mantenete en un peso adecuado: la pérdida de peso, si además se acompaña de la reducción del consumo de sal, propicia el descenso de la presión arterial. La presión alta es el primer causante del infarto y una de las causas principales de la mitad de las enfermedades cardiovasculares. 
  • Informate sobre tu estado de salud: realizá una consulta con un médico para que controle tu presión arterial, los niveles de colesterol y azúcar, el índice cintura-cadera y el índice de masa corporal.

lunes, 10 de septiembre de 2012

10 de Septiembre - Día Mundial para la Prevención del Suicidio

Hoy, 10 de septiembre se celebra el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, y por ello, en todo el mundo se fomentan compromisos y medidas prácticas para la detección temprana y tratamiento oportuno de la problemática. Se estima que diariamente cerca de tres mil personas acaban con su vida, y una de cada veinte no termina sólo con un intento. 

Puede decirse que el suicidio es un acto en el que un individuo intenta dañarse para dar fin a su existencia, es el "rechazo del amor a sí mismo", que desvaloriza la vida, y evidencia la pérdida de percepción de la belleza del mundo.

Lamentablemente, en un ambiente saturado de mensajes que proponen falsos modelos de felicidad, se dificulta que tengan lugar en los corazones de las personas la esperanza del amor pleno, que llena de significado y de alegría la vida. La creciente pérdida del sentido del respeto social favorece que el valor del respeto del cuerpo, sobre uno mismo y sobre la dignidad de la persona, se vea cada vez más de un modo materialista y utilitario.
Frecuentemente, se viven situaciones en las que podemos encontrarnos acorralados, "sin salida", con frustraciones, perdiendo expectativas favorables, ilusiones y proyectos. Cuando se deja de ver la vida como algo maravilloso, sin perder el asombro y el encanto sobre los sentimientos más bellos, se corre el riesgo de desorientarnos, perdiendo de vista el ideal supremo de vivir en el Amor.

Estamos llamados a promover que florezca en nosotros la vocación de ser, como se enfatizaba en una reciente asamblea de laicos, "sembradores de esperanza, servidores de la vida". Para ello debemos preocuparnos por nuestros hermanos para que puedan llegar a descubrir que la vida se vive con amor, y que esto no es algo ponderable, sino que es una infinita disposición de dar, de compartir. Es decir, que no se limita a la búsqueda de alcanzar metas parciales, sino que se dirige a buscar encaminarse por el camino de la esperanza verdadera, fundada en la fe en Dios Amor.

Difícilmente se pueda llegar a prevenir todos los suicidios, pero sí la mayoría.
Los síntomas que son causa de preocupación por sí mismo y otras personas incluyen:

• Insomnio o pesadillas recurrentes.
• Incapacidad para realizar una rutina normal cuando es necesario, por ejemplo, volver al trabajo, ocuparse de sus propios hijos o de las tareas del hogar.
• Sentimiento de aislamiento e incapacidad para relacionarse con otros para compartir el duelo.
• Ocupaciones constantes para evitar sentimientos.
• Incremento en el uso del alcohol o las drogas, incluyendo adicción a medicamentos de prescripción médica.
• Pensamientos suicidas.


Ante la amenaza de suicidio, no es fácil, estar serenos para decidir qué podemos hacer. Sin embargo, podemos orientarnos con una sugerencias de la Pastoral de la Salud que deberían ajustarse a cada caso:

Lo que se sugiere para ayudar
Establecer relación y comunicación abierta.
No esquivar el problema.
No dejar nunca sola a la persona.
Reafirmar su identidad (pronunciar su nombre, sus capacidades para superarse...).
Confirmar que hay otros que la quieren y desean ayudarla.
Demostrar que a usted le importa su persona (ya que lo eligió para confiarle este grave asunto).
Ayudarla a corregir el problema que originó la crisis.
Alentarla a una acción positiva.
Con prudencia comunicarse con alguien que pueda ayudar.
Implicar a la familia y amigos, siempre que sean contenedores.
Aconsejar ayuda profesional inmediata.

Lo que NO se sugiere
Pronunciar juicios moralizantes: “No, mujer, ¿por qué lo hiciste? ¿Hombre, no pensaste en tus hijos...?”. 
Mostrar gestos llamativos de sorpresa y rechazo.
Discutir y hacer de predicador.
Ser solucionador de todos sus problemas.
Hacerse responsable de sus responsabilidades.
Entablar relaciones paternalistas o infantilizantes con la persona afectada.
Disminuir la gravedad del asunto.
Querer evitarle el sufrimiento, superficializando el hecho.
Comparar el dolor que expresa la persona con nuestros anteriores sufrimientos.
Hacer de “policía", investigando toda su vida con montones de preguntas.
Mantener una actitud puramente consoladora.
Dar "recetas” rápidas y mágicas.

En caso de estar en situación de emergencia, debe comunicarse con los teléfonos 107 (Emergencias Médicas), 911 (Emergencia Policial) o con el 135 (Centro de Asistencia al Suicida).

Finalmente, es alentador que al acudir a medios simples que se basan en la escucha, el 74 % de las personas que son asistidas desisten de poner en riesgo su vida.


"La vida humana es sagrada e inviolable en todas sus fases y situaciones." (Juan Pablo II)